ENSA lee mensualmente los medidores de un 97% de sus clientes. De estos, más de la mitad no son leídos por causas ajenas a la empresa, ejemplo: medidores encerrados o fuertes lluvias en áreas de difícil acceso.
Su empresa de distribución puede promediar su consumo únicamente 2 veces al año por causas atribuibles a la empresa. En caso de que su factura haya sido promediada un mes, el medidor guarda en su memoria el consumo del cliente y permite en la próxima lectura registrar el consumo del tiempo transcurrido desde la última lectura de forma tal que se acredite o debite a su próxima facturación la diferencia del mes promediado.